De hipotecas y crisis matrimoniales
La publicación de una reciente sentencia de la Sala Primera del Tribunal Supremo, que viene a establecer que el pago de la hipoteca que grava la vivienda familiar debe hacerse por mitad, y no en función de la situación económica en que queden cada uno de los cónyuges tras la separación o el divorcio, ha provocado todo un huracán de comentarios que demuestran hasta qué punto nos encontramos ante un problema que afecta a un número verdaderamente significativo de hombres y mujeres en nuestro país, y, también, que las tensiones que provocan los conflictos económicos y familiares generan enfrentamientos tan enconados y, a veces, tan inexplicables, que no habrá ley ni sentencia judicial que pueda establecer una solución que resulte pacíficamente aceptada.No es la primera vez que nuestro Alto Tribunal…